DECIR HACIENDO

Si aplicáramos principios tan valederos como: Ser lo que se es. Hablar lo que se cree, y Vivir lo que se proclama hasta las últimas consecuencias y en las menudencias diarias, la vida sería distinta. La falta de coherencia sigue siendo unos de los grandes problemas que afrontamos hoy día a nivel social, educativo, familiar y del país mismo. Con frecuencia la práctica niega los deseos y proclamas de nuestros políticos y gobernantes. Así mismo notamos que esta costumbre se ha extendido a ambientes vividos dentro de las escuelas y hogares, y que suele ser muy contradictorio, pues se predica una cosa y se hace otra distinta, y es cuando los jóvenes se vuelven escépticos, rebeldes y con mucha frecuencia anárquico. Condición que lleva a confusión y desconocimiento de la autoridad. La falta de coherencia entre palabras y vida hace que se cometan las más duras injusticias. Es por ello que la mejor manera de decir es hacer, como lo predico José Martí, pues sabio no es el que sabe muchas cosas, sino el que vive lo que sabe.

ISABEL VRIGINIA CHIRINOS FLORES

21/08/2011