CONFUNDIDOS

Si hurgamos en el perfil de las personas del mundo actual, el común denominador arroja que están muy ocupados haciendo negocios, tratando de obtener más utilidades, viviendo la vida de otros y no la suya, gastando considerables cantidades de dinero en pagar gimnasios para inflar los egos, comprando vestidos para arropar carencias, tomando medicinas para intoxicarse más. Se rodean de aparatos electrónicos para sentirse más acompañados dentro de su soledad…El eslogan de las grandes campañas publicitarias dictan que usted es más feliz si camina con aquel calzado, se toma la bebida “X”, se perfuma con la fragancia tal, etc. Y es allí donde se confunde la felicidad con el mero reflejo de las cosas superfluas, que son adornadas con luces de neón, ofreciendo promesas e ilusiones. El mundo se nos muestra como un supermercado que nos ofrece saciar todos los caprichos…Necesitamos con urgencia educarnos en la trascendencia, en cultivar lo verdaderamente espiritual…En el bazar de las carencias todo vale por igual: horóscopos, tarots, religiones, sectas, etc, olvidando lo esencial, los sentimientos, el amor, el prójimo. Exceptuando a Dios, nada nos sacia, y Dios habita en lo más profundo del amor.

ISABEL VIRGINIA CHIRINOS FLORES

21/08/2011