LAS MUERTES QUE DUELEN
En este pais coexistimos con una dura realidad que no podemos esconder, a pesar de nosotros. Aunque quisieramos, no es conveniente ni normal...A veces nos distraemos y nos hacemos los locos para no ahondar en detalles y analisis, pero que irremediablemente, nos alcanza en cualquier momento...Ver a diario las cifras de homicidios, de gente caida por cualquier motivo, desde el mas futil hasta el mas impensable, me lleva a reflexionar una vez mas, acerca de que tenemos que parar esto, porque la vida se va diluyendo, y lo que es peor, nos vamos acostumbrando...No creo que nadie en este mundo se precie de insensible, por muy acorazado que trate de mantenerse, y no se timbre con la muerte de cualquier persona...Esta vez no voy a referirme a las centenas de muertes que ya ni asombran a nadie o solo espetan que son solo sensaciones de inseguridad lo que nos envuelve, sino a cuatro pérdidas, que no tienen conexión entre si, pero que en el fondo, llaman mi atención. La primera, es una muerte inducida, un suicidio, pero que sin ahondar en razones, mas bien es una valentia para unos el quitarse la vida, para otros es el miedo a enfrentar una realidad...La segunda, un filicidio, aborrecible desde todo punto de vista, pero que tiene visos originados por la mezcla de sectas religiosas y problemas psicológicos. La tercera, es la muerte que sobreviene de repente, sin motivos aparente de enfermedad, problemas u otra índole. y la cuarta, no menos importante, un cáncer vence a un futbolista de 21 años, ...puede que sea de las mas incomprensibles, igual que las otras. Si bien es cierto que la muerte es lo mas seguro, que debemos aprender a convivir con la idea de que nacemos para irremediablemente morir, no nos acostumbramos ni aprendemos , ni entendemos...Cada dia parece que las muertes son mas, pero menos justas, innecesarias...Casos aislados, que no tienen nada en comun, pero que intrinsecamente nos atañan, nos mueven a ser mejores humanos, a repensar nuestro modo de vivir, de mirar la vida desde otra óptica y con mas humildad...
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