A WHITNEY CON AMOR



Cuando Whitney Houston dijo que: “El peor demonio soy yo; puedo ser o mi mejor amigo o mi peor enemigo” quizás ya sabía en cierto modo su destino. Esta estrella se alzó a la fama cuando solo contaba 11 años, cantando en el coro en la  Iglesia  de su  New Yersey natal. Con una carrera extraordinaria  es sin duda un gran referente para la música soul y los 411 premios a lo largo de su carrera artística lo certifican. La cantante con más de 170 millones de álbumes vendidos, ganó 6 Grammy, 103 American music Awards, 74 Emmys y 58 MTV Music Awards y  6 Bilboard music awards. Solo el álbum de “El guardaespaldas” se convirtió en la banda sonora más vendida de todos los tiempos con más de 42 millones de discos vendidos, y todo lo logrado apenas con 20 años. Un fenómeno de la industria discográfica, con una poderosa y rica, luminosa, fresca y pura voz y   siendo rango vocal  altísimo, alcanzó el tono de una soprano. Es doloroso que hoy ya no esté…Demasiada carga tal vez... Y sería ese mismo  peso de la fama que la llevaría a oscuros y escabrosos  caminos, producto de un designio inescrutable hacia las drogas. Su muerte como la de tantos otros, es motivo de reflexión, y de comenzar a hacer algo, porque ya son innumerables las pérdidas de personas por este flagelo que avanza sin obstáculos, ante el asombro y dolor de algunos, pero ante la complacencia de otros. Cuantos más deben morir para que se haga algo? Esta industria facinerosa , en la que cada día aumentan mas sus tentáculos, al igual que el narcotráfico, estan desmadrando muchos hogares y a la sociedad. “The voice”  murió, y dejó entrever ciertas controversias, bajo un clima de críticas favorables a su trabajo, pero negativas en torno a su vida, porque  así es el mundo del espectáculo, recordémosla mejor, como la diva que fue, y que se convirtió a partir de su deceso en una leyenda. Hasta siempre Whitney…
 
ISABEL VIRGINIA CHIRINOS FLORES
21/02/2012

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