La Caverna de Platón

Todos los hombres nacen con un propósito preestablecido que deben llevarlo a cabo según sean las circunstancias. Es por ello que se hace obligatorio que se preparen y eduquen para ser herramientas que ayuden a construir la sociedad. Un hombre que estudie, que se instruya en cualquier oficio no podrá ser arrastrado por los encantadores de serpientes, ni podrán ser encerrados en la caverna de Platón. Tampoco engrosarán las masas de ignorantes que solo ven la representación de los objetos y sonidos que pueden discernir nuestros sentidos físicos, o las sombras de los objetos proyectados en el muro. Solo aquel que realmente logra escapar de la cueva y tenga arrojo y coraje y empleando su intelecto, romperá esquemas y paradigmas para desentrañar la verdadera naturaleza de las cosas. “Contempla a los seres humanos como si estuvieran en una morada similar a una caverna subterránea, con su entrada alargada, abierta a la luz en toda la amplitud de esa cueva. Están allí desde su niñez, con sus piernas encadenados de forma que no se pueden se, y solo ven lo que esta frente a ellos, siendo incapaces por sus ataduras de girar la cabeza hacia atrás.” (Platón, La República)
Isabel Virginia Chirinos Flores